El presidente del Concejo Municipal de Hialeah, Jesús Tundidor, y el departamento de bomberos recorrieron las instalaciones de vida asistida de la ciudad el miércoles, repartiendo mascarillas y desinfectante de manos.
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Desarrollaron un grupo de trabajo ya que Hialeah tiene la mayor concentración de esas instalaciones en el estado, dice Tundidor.
Ahora, el gobernador Ron DeSantis dice que en unas semanas, aquellos que viven y trabajan en estas instalaciones de vida asistida podrían recibir la primera ronda de una vacuna COVID-19. , una vez aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU.
“Podríamos vacunar a todos los residentes de cada hogar de ancianos y centro de atención a largo plazo para fines de diciembre”, dijo DeSantis.
Michele Pérez, propietaria de la instalación de vida asistida Villa Rosa I, dice que el estado ya se ha comunicado sobre la distribución de la vacuna y la mayoría de sus residentes (alrededor del 80%) la quieren.
“El proveedor de elección, CVS o Walgreens, vendrá a la instalación con las dosis de la vacuna y la administrará y la proporcionará aquí mismo en cada instalación”, dijo Pérez. “[Los residentes] quieren ir a la tienda de la esquina. Quieren ir a visitar a la familia que quieren volver a sus vidas normales. Está afectando su salud mental “.
Mientras los funcionarios de salud consideran autorizar el uso de emergencia de una vacuna , el 61% de las personas dicen que están dispuestas a vacunarse si se aprueba una vacuna, según una encuesta nacional de la Universidad de Quinnipiac publicada el miércoles. El treinta y tres por ciento dice que no cree que esté dispuesto.
En Florida, más de 7.500 residentes y personal de hogares de ancianos han muerto por COVID-19, casi el 39% de las muertes en el estado por el virus.
“Muchos de ellos están listos y dispuestos a recibir [la vacuna]”, dijo Pérez sobre sus residentes. “Sienten que van a estar más seguros de esa manera y que sus vidas pueden volver a la normalidad”.
