La desaparición el miércoles del exvicepresidente Óscar Denis en una zona de influencia del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) se sumó a otro hecho que tiene en vilo al país sudamericano: los recientes enfrentamientos con esa guerrilla en el que murieron dos niñas de 11 años.
Sur Florida/Telemundo 51
El Partido Liberal, el principal de la oposición, al que pertenece Denis, de 74 años, aseguró el jueves que se trata de un secuestro y responsabilizó del mismo al presidente Mario Abdo Benítez, al tiempo que convocó una reunión de urgencia de su directorio este jueves.
El gobierno no ha confirmado de momento que se trate de un secuestro, si bien Abdo Benítez se trasladó a la sede del comando militar en el departamento de Concepción para seguir de cerca los operativos de seguridad que se pusieron en marcha tras la desaparición.
Familiares de Denis denunciaron su desaparición junto a quien sería un peón de la estancia propiedad del exvicepresidente, ubicada en la frontera entre ese departamento y el de Amambay.
Ambos habrían salido en una camioneta que fue hallada a unas millas de distancia.
Desde el Ejecutivo indicaron que un grupo de artificieros aseguraron la camioneta en previsión de pistas, mientras que el fiscal del caso dijo a un medio que se encontró en su interior un escrito de los autores del presunto secuestro, cuyo contenido no fue divulgado.
Denis, del opositor Partido Liberal, ocupó el cargo de vicepresidente durante el gobierno presidido por el liberal Francisco Franco (2012-2013), quien reemplazó al destituido Fernando Lugo.
Sus familiares aseguraron a algunos medios locales que el pasado año se sometió a una operación en Brasil que no especificaron.
La noticia de la desaparición provocó que se levantara la sesión reservada que el Ejecutivo mantenía en el Congreso para informar sobre el operativo del miércoles de la semana pasada en el que murieron las dos niñas.
La primera reacción opositora fue la del Partido Liberal, cuyo líder, Efraín Alegre, responsabilizó en sus redes sociales al mandatario por su “manifiesta torpeza e inutilidad por el secuestro del exvicepresidente Óscar Denis”.
Alegre exigió la “inmediata destitución” del ministro de Defensa, Bernardino Soto Estigarribia; del de Interior, Euclides Acevedo, y del comandante Héctor Grau, de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), el cuerpo de combate contra el EPP.
A las críticas se agregó el Frente Guasu, la mayor articulación de izquierda del país, que en un comunicado exigió a Abdo Benítez, del conservador Partido Colorado, que “asuma su responsabilidad ante toda la sociedad paraguaya para no permitir la exposición de más víctimas inocentes”.
Esas fuerzas ya habían repudiado el operativo militar de hace siete días en una zona boscosa de Concepción en el que fallecieron las dos niñas de 11 años.
Antes de confirmarse esas edades, Abdo Benítez se trasladó al campamento guerrillero del EPP que fue desarticulado tras la muerte de las menores y calificó de exitoso ese operativo.
Las críticas arreciaron después de que el gobierno argentino confirmara que tenían 11 años y que eran de esa nacionalidad.
El Ejecutivo paraguayo asegura que eran hijas de líderes del EPP y que formaban parte de la guerrilla, sin descartar que crecieron en Paraguay.
No obstante, la imagen del gobierno se fue desgastando ante los procedimientos de la Fiscalía, que ordenó el entierro de las menores sin haber sido identificadas, así como la destrucción de la prendas que vestían, con el protocolo COVID como argumento.
Esa sepultura estuvo precedida de un examen forense de urgencia que estableció las edades de las víctimas entre 15 y 17 años.
Sin embargo, los datos aportados por la Cancillería argentina motivaron su exhumación y el traslado de los cuerpos a Asunción para un segundo análisis, que determinó que tenían 11 años.
En ese operativo lograron huir una docena de guerrilleros, entre quienes estarían algunos de sus líderes.
La zona se encuentra en el radio de la estancia donde se encontraba Denis antes de su desaparición.
De posiciones marxistas, el EPP se creó en 2008 y las autoridades le atribuyen unos 50 asesinatos.
