La compañía ha explicado este martes que comenzó a operar uno de sus barcos el pasado domingo y que hasta finales de año planea recuperar varias de sus embarcaciones, en las que aplicará protocolos de seguridad, como la limpieza constante de las instalaciones, la disposición de geles hidróalcohólicos y el establecimiento de zonas con termómetros clínicos de autoservicio.
Sur Florida / hosteltur
Asimismo, la tripulación también se someterá a una prueba molecular y guardará una cuarentena de 14 días antes de cada viaje. En este caso, la naviera ha incluido realizarles una vez al mes una prueba nasofaríngea.
Según la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA, en inglés), la paralización de la actividad de las empresas de cruceros como consecuencia de la pandemia del coronavirus costará a la industria a nivel global alrededor de 50.000 millones de dólares (42.400 M €) y una destrucción de empleo de 334.000 puestos de trabajo.