Ciudades universitarias en alerta tras brotes de Covid-19. En un momento en que escuelas y negocios en todo Estados Unidos reciben autorización para reabrir, los poblados que son sedes de universidades están volviendo al confinamiento debido a que ha habido demasiadas fiestas y demasiadas infecciones de COVID-19 entre estudiantes.
Sur Florida / Telemundo 51
Estados Unidos se mantiene como el país más afectado por el brote con 5,957,599 casos y 183,441 muertes, según el recuento independiente de NBC News este sábado a las 5 p.m. hora del Este.
Texas se convirtió el lunes en el tercer estado en superar los 600,000 casos de coronavirus (actualmente 626,893 casos y 12,560 decesos), después de que Florida superase esta marca el domingo (615,806 infectados, 11,099 muertes).
California se mantiene como el estado con más contagios de COVID-19 (698,318 casos, 12,834 fallecimientos). Cinco estados ya han superado las 10,000 muertes por COVID-19 cada uno: Nueva York, Nueva Jersey, California, Texas y Florida.
Nueva York sigue siendo el estado con más decesos (438,796 contagios, 33,762 muertes), seguido por Nueva Jersey (194,135 casos y 15,922 fallecimientos). Le siguen: Georgia, con 265,372 casos y 5,471 muertes; Illinois, con 231,185 contagios y 8,206 fallecimientos.
Más de 300 alumnos de la Universidad de Missouri han dado positivo al coronavirus, y el condado circundante tiene una tasa de positivos de 44% en las pruebas de detección, por lo que el director local de salud ordenó el viernes que los bares dejen de servir alcohol a partir de las 9 p.m. y cierren a las 10 p.m.
El gobernador de Iowa ordenó también el cierre de todos los bares en los alrededores de la Universidad de Iowa y de la Universidad Estatal de Iowa, mientras que el alcalde de Tuscaloosa, Alabama, hizo lo mismo en esa ciudad, donde se encuentra la universidad más importante del estado.
La Universidad de Alabama informó el viernes que otros 481 estudiantes han dado positivo en la prueba de COVID-19, con lo que sumán más de 1,000 infecciones desde que los estudiantes regresaron al campus para el otoño.
Los 481 casos adicionales en el campus de Tuscaloosa fueron reportados entre el 25 y el 27 de agosto. El sistema universitario dijo que no hay estudiantes hospitalizados.
“Lo que estamos viendo en nuestras violaciones (a las normas) es que están ocurriendo ya avanzada la noche”, dijo por su parte Stephanie Browning, directora del departamento de salud de Columbia, Missouri. “Grupos grandes que se reúnen. No están usando sus mascarillas, no están haciendo distanciamiento social”.
En Utah, el concejo municipal de la ciudad de Provo anuló un veto de la alcaldía con el fin de aprobar una orden sobre el uso de mascarillas, la cual incluye una multa de $500 por organizar reuniones grandes sin cubrebocas, unos días antes de que estudiantes de todo el país regresen a la Universidad Brigham Young.
Pero de todas maneras al concejo le preocupa que los alumnos universitarios que comparten dormitorios, baños y duchas puedan convertirse en “superpropagadores” y lleven el virus fuera del campus, dijo George Handley, presidente del consejo.
“Ya estamos viendo lo que ha ocurrido en todo el país en otras universidades”, señaló.
Pero una fiesta reciente en un almacén, organizada por una compañía promotora estudiantil de la Brigham Young llamada Young/Dumb, también generó preocupaciones cuando surgieron en internet fotografías de cientos de personas que se divertían sin mascarillas.
Los brotes desde que los estudiantes comenzaron a regresar a los campus en las últimas semanas han incrementado las tensiones entre las universidades y las localidades donde se encuentran, lo que ha derivado en recriminaciones entre políticos locales y autoridades universitarias.
El balance provisional de fallecidos ha superado ya con creces la cota más baja de las estimaciones iniciales de la Casa Blanca, que proyectó en el mejor de los casos entre 100,000 y 240,000 muertes a causa de la pandemia.
El Instituto de Métricas y Evaluaciones de Salud (IHME) de la Universidad de Washington, en cuyos modelos de predicción de la evolución de la pandemia se fija a menudo la Casa Blanca, calcula que para las elecciones presidenciales del 3 de noviembre EEUU habrá superado los 230,000 fallecidos por COVID-19.