China instó a Estados Unidos a reconsiderar su decisión de sancionar a una organización de Xinjiang y dos personas vinculadas a la misma, al tiempo que ha prometido “luchar decididamente” si Washington persiste.
Sur Florida /Diario Las Américas
El Ejecutivo estadounidense impuso nuevas sanciones al Cuerpo de Producción y Construcción de Xinjiang (CPCX), que describió como “una organización paramilitar” subordinada al Partido Comunista de China (PCCh) y a dos personas relacionadas con ese cuerpo por abusos cometidos contra los uigures y miembros de otras minorías musulmanas en la región.
“La acción de Estados Unidos es una grave interferencia en los asuntos internos de China y una grave violación de las normas básicas que rigen las relaciones internacionales”, dijo el portavoz del Ministerio de Exteriores chino Wang Wenbin, que ha remarcado que Pekín se opone “firmemente” a esta decisión y la condena “enérgicamente”.
De acuerdo con el funcionario del régimen comunista chino, los asuntos relacionados con la región de Xinjiang no están relacionados con los Derechos Humanos, la etnia o la religión, sino que son asuntos de antiterrorismo. “Los asuntos de Xinjiang son puramente asuntos internos de China. Estados Unidos no tiene ningún derecho ni motivo para interferir”, acotó.
Asimismo, defendió que la acusación de “vigilancia” de las minorías étnicas de Xinjiang vertida por Washington “no es más que un rumor” y ha afirmado que no tiene ninguna base. “Es una práctica internacional común utilizar productos científicos y tecnológicos modernos y grandes datos para mejorar el gobierno social, y Estados Unidos no es una excepción”, detalló.
El anuncio de Washington llegó diez días después de que la Oficina de Industria y Seguridad del Departamento de Comercio de Estados Unidos añadiera a once empresas chinas en su lista de sancionados por su “implicación” en abusos contra la minoría musulmana uigur en Xinjiang.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump ya promulgó una ley que permite a Washington tomar medidas e imponer sanciones a Pekín por la situación de los Derechos Humanos de los uigures en el país asiático. El Gobierno chino ha impuesto sanciones a varios altos cargos estadounidenses en respuesta.
Pekín pide a EEUU permita a periodistas chinos
El Gobierno chino ha pedido a Washington que permita a los periodistas chinos trabajar en suelo estadounidense y acabe así con la “represión política” contra sus ciudadanos. Wang señaló que ningún periodista chino ha logrado renovar su visado de trabajo en Estados Unidos desde el pasado mes de mayo.
Hace cuatro meses que la Administración Trump dispuso una serie de nuevas directrices y restringió el acceso a los visados de los periodistas de origen chino, que solo podrán permanecer en el país durante un periodo de 90 días desde la expedición de su visado.
Los dos países han anunciado baterías de medidas contra medios de comunicación y periodistas en reciprocidad por las restricciones impuestas por la otra parte. En marzo, China expulsó a varios periodistas norteamericanos que tenían pendiente renovar sus credenciales.
