Luis Álvarez sin duda fue un héroe. Este exdetective de la ciudad de Nueva York fue uno de los primeros en llegar a la Zona Cero, pero no contento con eso permaneció entre los escombros de las Torres Gemelas durante semanas contribuyendo a salvar personas.
Son muchos los que hoy deben su vida a este hispano que ha sido contabilizado como uno de los 50,000 ciudadanos que fue contaminado por las toxinas emanadas por la gigantesca estructura durante su colapso y después del artero ataque que sufrió.
Durante su último tiempo en este planeta Álvarez continuó luchando, esta vez por el reconocimiento del fondo de compensación a las víctimas de aquella aciaga fecha, el 11 de septiembre, cuando cientos de personas perdieron la vida.
Álvarez contaba con 34 años al momento de los ataques terroristas. En 2016 se le diagnosticó cáncer de colón desde ese momento fue sometido a 69 rondas de quimioterapia hasta que en la última intervención a la que fue sometido no pudo superar el colapso de su hígado y murió a los 53 años
Mediante una publicación en Facebook, su abogado Matthew McCauley anunció el deceso.”Al final le dijimos que había ganado esta batalla por las muchas vidas que había tocado al compartir su batalla de tres años. Estaba en paz con eso, rodeado de familiares”, agrega en el comunicado.
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