El Faena Hotel tiene un lobby digno de un faraón, lleno de luz que ilumina gigantescas columnas doradas. A la distancia asoma una escultura también dorada de un esqueleto de mamut con palmas, agua azul y el océano Atlántico de fondo.
El hotel es el principal componente del Faena District (Distrito Faena), un sector de Miami Beach venido a menos, con estructuras abandonadas y lotes vacíos, donde han surgido opulentos hoteles, condominios y un centro artístico. El proyecto de 1.000 millones de dólares comenzó en el 2013 y es una iniciativa del magnate hotelero argentino Alan Faena, en sociedad con el multimillonario estadounidense Len Blavatnik. Se encuentra a unos tres kilómetros (dos millas) de South Beach, en una estrecha faja de tierra entre un canal y el océano.
El Faena Hotel tiene 169 habitaciones y conserva la estructura art deco de Saxony Hotel original, construido en 1947. La renovación de Faena combina el esplendor de la belle epoque con un sabor tropical. Faena contrató desde un director de Hollywood hasta un chamán mexicano para crear el ambiente que buscaba. El hotel tiene esculturas de tigres, lámparas doradas con forma de palmas y rosas rojas.
Faena encomendó la decoración del interior a Baz Luhrmann, director de las películas “Molino Rojo” y “El gran Gatsby”, y a la diseñadora de vestuario Catherine Martin.
“Para mí, es como el cine. Vengo a entregar mi corazón y contar mi historia”, dijo Faena, un ex diseñador de modas, durante una entrevista en su estudio, montado en un tráiler.